martes, 21 de abril de 2009

LA TRAVESÍA SAGRADA 2009

La tercera edición de La Travesía Sagrada Maya se llevará a cabo del 21 al 23 de mayo del presente año. Saldrán 30 canoas de ocho metros de largo, con tripulaciones de cuatro a seis canoeros. El reto es cruzar el Canal de Cozumel desde Polé, hoy Xcaret, a la isla de Cuzamil, hoy Cozumel; y al día siguiente, cruzar a Xamanhá, hoy Playa del Carmen.

La Travesía Sagrada Maya es una recreación de la antigua peregrinación ritual realizada por los pueblos habitantes de la Península de Yucatán a “Polé” con la intención de embarcarse hacia “Cuzamil” para adorar a la diosa Ixchel y consultar su oráculo, el único existente en toda la región.

Iniciada la travesía, las 30 canoas con destino a Cozumel recorren alrededor de 28 kilómetros (tan sólo de ida), lo que representa entre 6 y 7 horas de remo continuo en mar abierto, el cual posee una profundidad estimada de 420 metros y corrientes de sur a norte de 2 a 4 nudos aproximadamente. Es por esto que todos los canoeros participantes iniciaron entrenamientos de remo, nado, flotación y acondicionamiento físico desde el pasado mes de enero.

Para comprender la importancia que la ritualidad jugaba en los antiguos mayas es necesario saber que para ellos la razón por la cual los dioses crearon a los humanos era simple: necesitaban quien los venerara y alimentara. La justificación fundamental de la existencia humana giraba alrededor del servicio a sus dioses.

Los antiguos mayas querían estar en comunicación con sus dioses, y para hacerlo, necesitaban llevar a cabo ciertos ritos, agrupados alrededor de un ritual. (Un rito, en el sentido amplio de la palabra, es una costumbre o ceremonia, una práctica muy establecida y ordenada dirigida a lo sobrenatural. En este sentido, un ritual es un conjunto de ritos).

El propósito de un rito es introducir a los hombres en el ámbito de lo sagrado. Los rituales estaban muy regulados y no podía llevarlos a cabo cualquier persona, solamente los sacerdotes y gobernantes lo hacían.

En los rituales públicos se permitía la participación de la comunidad. Estos rituales eran asociados a la fertilidad, a la veneración de los dioses o a la entronización de los gobernantes. En la Travesía Sagrada Maya se recrean rituales públicos dirigidos a la diosa Ixchel, los cuales están encaminados fundamentalmente a solicitar sus favores: la salud, la fertilidad de la tierra, la fecundidad de las personas y la benevolencia de las condiciones climáticas.

Primera Parte: La Purificación - jueves 21 al atardecer y viernes 22 al amanecer en Xcaret.
Durante la representación artística de la Travesía, se podrán observar en el ritual acciones de purificación del espacio y de los participantes, como las oraciones, los cantos, las danzas y las ofrendas (Estas representaciones seguían reglas precisas y cada elemento observado tenía un significado particular). También se llevarán a cabo rituales para pedir la buena fortuna de los intrépidos navegantes que cruzarán el mar para llegar a Cozumel.

Segunda Parte: El Cruce - viernes 22 al amanecer en Xcaret.
La travesía marítima equivale simbólicamente al paso por un inframundo acuático, en el transcurso del cual ocurre una muerte ritual.

Tercera Parte: El Renacimiento – viernes 22 al medio día en Cozumel.
Al llegar a Cozumel hay un renacimiento ritual, los navegantes llegan a su destino renacidos espiritualmente después de su intensa convivencia con el mar y las fuerzas de la naturaleza.

Cuarta Parte: El Oráculo o Mensaje – viernes 22 al atardecer en Chankanaab.
En esta parte se realiza una recreación artística en donde los sacerdotes mayas tienen comunicación con la diosa Ixchel y se escucha el mensaje y su respuesta a las múltiples peticiones de los hombres.

Quinta Parte: El Regreso – sábado 23 al amanecer en Chankanaab.
La travesía marítima de regreso también equivale simbólicamente al paso por un inframundo acuático, en el transcurso del cual ocurre una muerte ritual.

Sexta Parte – Recepción y Entrega del Oráculo – sábado 23 a medio día en Playa del Carmen.
De igual manera que a la llegada a Cozumel, los navegantes tienen un renacimiento ritual. El pueblo ansioso recibe los designios de Ixchel y celebra con júbilo el regreso de los valientes navegantes.

En la actualidad, la realización de La Travesía Sagrada Maya es posible gracias a la participación de cientos de voluntarios de la comunidad, que participan como canoeros, elenco artístico y personal de apoyo. Es un gran esfuerzo compartido entre Xcaret, el Municipio de Cozumel y el Municipio de Solidaridad.

La Travesía Sagrada Maya nos trae de vuelta el pasado maya de los siglos XI d.C al XVI d.C con su riqueza histórica y su legado cultural. Es un ejemplo vivo de la relación de los mayas con lo sagrado. Revive el valor y la audacia de los antiguos navegantes que contribuyeron con sus redes comerciales al último esplendor de su cultura en la Península de Yucatán.

No hay comentarios:

Publicar un comentario